Siempre ha sido de la creencia popular que los animales, en especial los gatos y perros, pueden sentir los sismos antes de que sucedan, es decir, los pueden presentir y cambian su comportamiento de una manera drástica cuando esto sucede. Aunque no existe una prueba científica que logre constatar este hecho, en las últimas fechas salió a la luz un video que podría aportar una nueva evidencia y revivir el debate.
En el video, tomado en la prefectura de Wakayama, Japón, podemos ver como un grupo de gatos se alerta justo antes de que el sismo de 6.1 grados azotara la ciudad de Osaka, en el que murieron 4 personas.
Una de las teorías que explican lo que sucede en este video es que los sismos tienen diferentes tipos de ondas. Los humanos podemos percibir las ondas secundarias (S) en las que el desplazamiento es transversal a la dirección de propagación (movimientos transversales).
Por otro lado, los gatos y otro tipo de animales tienen la capacidad de detectar las ondas primarias (P) que tienen movimientos de aproximadamente 1.73 veces más rápidos que las ondas S (movimientos longitudinales).
Ya existen cientos de estudios que pretenden asegurar la sensibilidad de los animales ante la presencia de los sismos, pero el Centro Alemán de Investigación en Geociencias (GMZ) afirma que no se pueden tomar en cuenta, ya que la mayoría de estos estudios no se realizó con el rigor científico suficiente. En ninguno de ellos se registró qué estaba haciendo el animal antes del temblor o después, ni la frecuencia con la que se comportaba de esta manera.
Mientras se aportan o no nuevas pruebas de que los animales pueden presentir los sismos, estamos seguros que muchos de lo que tienen mascotas en casa podrían asegurar que esto sucede en más de una ocasión. Ahora solo falta que se presenten las pruebas científicas necesarias para que sea un hecho aceptado y sin discusión.