El Día Internacional del Libro es una conmemoración que tiene como objetivo fomentar la lectura, la industria editorial y la protección de la propiedad intelectual a través del derecho de autor. La UNESCO promueve esta celebración desde el 23 de abril de 1996 cuando se inició en varios países y para 2008, el número donde se celebraba ya alcanzaba más de cien.
Fue durante la Conferencia General de la UNESCO de 1995 que se decidió rendir un homenaje universal a los libros y autores. Así se alentaría a las personas, en especial a los jóvenes, a que descubrieran el placer de la lectura y, al mismo tiempo, que se valoraran las irreemplazables contribuciones de todos aquellos que han colaborado e impulsado el progreso social y cultural de la humanidad. Junto con el Día Mundial del Libro y el Derecho de Autor, fue creado el Premio UNESCO de Literatura Infantil y Juvenil Pro de la Tolerancia.
Se escogió como día para la celebración el 23 de abril, porque se supone que coincide con el fallecimiento de Miguel de Cervantes, William Shakespeare e Inca Garcilaso de la Vega. Sin embargo, la razón inicial para esta fecha fue la muerte de Cervantes, aunque él murió el 22 y enterrado el 23. Por otro lado, Shakespeare sí falleció el 23 de abril, pero del calendario juliano, que correspondería al 3 de mayo del calendario gregoriano.
Cada año es escogida una capital mundial del libro y su mandato comienza cada 23 de abril. Los responsables de esto son la UNESCO y las tres organizaciones profesionales internacionales del mundo del libro: la Unión Internacional de Editores, la Federación Internacional de Libreros y la Federación Internacional de Asociaciones e Instituciones Bibliotecarias.
La primer Capital Mundial del Libro nombrada por iniciativa de la UNESCO fue Madrid en el 2001, y desde entonces se nombra una diferente cada año. Para el año en curso, se escogió a Sharjah, en Emiratos Árabes Unidos y para el 2020 se tiene a Kuala Lumpur, Malasia.