Luego de que el fin de semana se pudieron observar reuniones y fiestas familiares, particulares, en calles y salones principalmente de la periferia de la ciudad, el secretario general de Gobierno, Alejandro Leal Tobías, admitió que aunque hay números de reporte, a los que la ciudadanía puede acudir para pedir a las autoridades que revisen las aglomeraciones, éstas no se dan abasto para atender todos los llamados.
Por ese motivo, Leal Tobías hizo un llamado a la población joven que se está reuniendo los fines de semana, para que eviten el relajamiento social de las medidas para contener la propagación de COVID-19, cuya cifra de nuevos contagios, rebasó hoy los 200 nuevos casos confirmados; más del 1 por ciento de la población potosina ha pasado ya por la enfermedad y casi el 3 por ciento, ha tenido contacto, o ha resultado sospechosa.
La entidad se encuentra en Semáforo Naranja del riesgo epidémico al menos hasta el 6 de diciembre, el viernes próximo, cuando se darán a conocer los nuevos resultados del análisis de los indicadores; hace una semana la titular de Salud Mónica Rangel, informó que en el estado, el número de hospitalizaciones por COVID, están provocando nuestra permanencia en el color naranja del riesgo.
Hoy, Leal Tobías señaló que el escenario de ingresar al semáforo rojo, que es posible según el número de contagios y los incrementos de hospitalización de los recientes días, provocaría “un caos económico, para todos los comercios que se han proveído (de productos) para comercializar durante diciembre”.
Si nos vamos a semáforo rojo, advirtió Leal Tobías, “tendríamos que cerrar todo, y quedarían únicamente las actividades esenciales, y esto no sería culpa de COEPRIS; sino de todos”.
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